martes, 30 de agosto de 2011

Casi un plagio

YA VAN VEINTE AÑOS DE NEVERMIND y no ha pasado nada:
todo sigue, aunque envejecido, igual que entonces.

Yo sigo recorriendo
las habitaciones más oscuras de la noche,
esas en que mis canas prematuras
destacan más cada día,
y tú, todavía insomne,
prendida a la pantalla
conviertes en unos y ceros la amistad.

El mundo continúa quizá peor
pero no mucho más que entonces.

Ahora los meseros ya no usan "joven"
para dirigirse a nosotros y dicen
"señor" y "señora" mientras los desconocidos
confunden los hijos de nuestros fallidos matrimonios
como si fueran nuestros.

Y el twitter y los blogs replican
lo felices que fuimos entonces.

Todo sigue igual. Nevermind. O quizá Nevermore.

miércoles, 17 de agosto de 2011

Un cuento tristísimo de Sherman Alexie

IDOLATRÍA

Marie esperó horas. Estaba bien. Ella era india y todo lo indio -powwows, funerales y bodas- requería paciencia. Esta audición no era india, pero ella estaba lista cuando dijeron su nombre.

“¿Qué vas a cantar?”, preguntó el británico.

“‘Every Reservation Girl Loves Patsy Cline’”, dijo ella.

“Escuchémosla”.

Sólo pudo cantar la primer estrofa antes de que la interrumpieran.

“Eres una cantante horrible”, le dijo. “No vuelvas a cantar nunca”.

Ella sabía que ese momento se transmitiría por la cadena nacional. Ella había estado de acuerdo en aceptar cualquier humillación.

“Pero mis amigos, mis maestros de voz, mi madre me dicen que soy buena”.

“Te mintieron”.

¿Cuántas canciones había cantado Marie en su vida? ¿Cuántas mentiras le habían contado? Enfrente de la cámara, Marie hizo la cruel suma, se fue corriendo hasta la habitación verde y lloró en los brazos de su madre.

En este mundo, debemos amar a los que mienten. O vivir solos.

(Publicado en HC).