1992: Jesús Ordovás y Julio Ruiz ponen un día y otro la misma maqueta, una canción que con el tiempo acabaría por convertirse en mítica: “Mi hermana pequeña”. Con esa conmoción nace una leyenda que hasta hoy sigue. Hipersónica lo resume mejor de lo que yo podría hacer: “Son el mejor grupo de la historia de España: ningún grupo ha conseguido lo que ellos en sus más de 16 años en activo. Ninguno. Surgieron con unas condiciones mínimas y han llegado a cobrar casi diez millones de pesetas por concierto, donde son auténtica dinamita. Han conseguido situarse con un sonido distintivo, una calidad en las letras buenísima, un nivel de ventas decente para este país de descargas piratas, y sobre todo: han creado una cultura en torno a ellos. O te gustan o les odias, no suele haber término medio.”
2010: El boca a boca ahora es página a página, blog a blog, myspace a myspace. Pero, la misma emoción de entonces, ese “estos sí”: “En efecto, Odio París recuerdan a los Planetas, y retrocedimos diez o quince años en el tiempo, y por un momento hasta me pude creer la ilusión de tener la misma edad que los que estaban sobre el escenario”. Y, en efecto, ha pasado el tiempo.
Bajo Presión / Agonía
-
A horas de la discusión en la Cámara de Diputados de la desaparición del
Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección
de ...
Hace 7 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario