martes, 30 de agosto de 2011

Casi un plagio

YA VAN VEINTE AÑOS DE NEVERMIND y no ha pasado nada:
todo sigue, aunque envejecido, igual que entonces.

Yo sigo recorriendo
las habitaciones más oscuras de la noche,
esas en que mis canas prematuras
destacan más cada día,
y tú, todavía insomne,
prendida a la pantalla
conviertes en unos y ceros la amistad.

El mundo continúa quizá peor
pero no mucho más que entonces.

Ahora los meseros ya no usan "joven"
para dirigirse a nosotros y dicen
"señor" y "señora" mientras los desconocidos
confunden los hijos de nuestros fallidos matrimonios
como si fueran nuestros.

Y el twitter y los blogs replican
lo felices que fuimos entonces.

Todo sigue igual. Nevermind. O quizá Nevermore.

No hay comentarios: