martes, 1 de febrero de 2011

La Copa de Europa

Jugamos en ligas diferentes.
Nuestras coincidencias, pocas, eran accidentes del destino: caprichos de niña bien jugando a ser mala, destellos del niño mal que quiso ser listo.
Tarde o temprano el tiempo pone las cosas en su sitio.
Han aprendido a sonreír con esa media sonrisa tan de político. Has aprendido a llamar por teléfono para algo más que quedar o reprochar.
Jugamos en ligas diferentes.
Hasta que a alguien le llega el momento de dejar de jugar.

No hay comentarios: